
El peso mexicano se posicionó como la divisa emergente más depreciada el martes 21 de enero de 2025, tras el anuncio del presidente estadounidense Donald Trump sobre la posible imposición de aranceles del 25 % a las importaciones de México y Canadá, a partir de febrero. Esta medida podría tener un impacto significativo sobre la economía mexicana, dada la fuerte dependencia de México respecto a las remesas y al comercio con Estados Unidos. A continuación, analizamos las razones detrás de esta caída y las posibles consecuencias para el futuro económico del país.
El impacto de la amenaza de Trump en el peso mexicano
El martes, el peso mexicano cerró con una cotización de 20.65 pesos por dólar estadounidense, lo que representó una depreciación del 0.62% en comparación con el día anterior. Según datos del Banco de México (Banxico), la jornada comenzó con una cotización de 20.72 pesos por dólar, alcanzando un mínimo de 20.54 pesos y un máximo de 20.73 pesos, lo que refleja una gran volatilidad en el mercado.
Según Gabriela Siller, directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base, la depreciación del peso se debió a un aumento en la aversión al riesgo respecto a México, causada por las políticas proteccionistas anunciadas por Trump. Siller detalló que, aunque es improbable que se implementen aranceles generales del 25 % debido a las complicaciones logísticas y los efectos adversos sobre la economía estadounidense, las amenazas generaron una reacción inmediata en los mercados.
La vulnerabilidad económica de México ante medidas de Trump
México se encuentra en una posición vulnerable debido a su dependencia económica del comercio con Estados Unidos y las remesas enviadas por los connacionales que residen en el país vecino. El posible aumento de aranceles podría afectar de manera directa las exportaciones mexicanas, generando un aumento de costos para las empresas y afectando la competitividad de productos mexicanos en el mercado estadounidense.
El Grupo Financiero Citi México mantuvo sus proyecciones para el tipo de cambio en 2025 y 2026, situando el dólar estadounidense en 20.95 pesos al cierre de 2025 y 21.49 pesos para 2026, lo que sugiere una cierta estabilidad en el mediano plazo. Sin embargo, la incertidumbre política y las amenazas de aranceles continúan pesando sobre el peso mexicano.
Perspectivas económicas y el rol de Banxico
Por otro lado, algunos analistas consideran que la ralentización de la inflación en México podría aumentar la probabilidad de que el Banco de México (Banxico) recorte las tasas de interés en su reunión de febrero de 2025. Esta medida podría contrarrestar parcialmente el impacto negativo de la depreciación del peso, pero también plantea desafíos adicionales, como una posible reducción del consumo interno.
En este contexto, las decisiones de política monetaria por parte de Banxico y la Reserva Federal de Estados Unidos jugarán un papel crucial en el comportamiento del peso mexicano en los próximos meses.
La reacción del mercado ante las políticas proteccionistas de Trump
La posible imposición de aranceles y otras medidas proteccionistas por parte de Trump generan un entorno de incertidumbre en los mercados financieros, lo que afecta tanto al peso mexicano como a otras divisas emergentes. La especialista en mercados de Pepperstone, Quásar Elizundia, señaló que la ralentización de la inflación podría incentivar al banco central mexicano a adoptar una política más flexible en términos de tasas de interés, lo que contrasta con las expectativas de una política monetaria más restrictiva por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.
¿Qué significa esto para la economía mexicana?
En resumen, la depreciación del peso mexicano refleja la creciente incertidumbre ante las políticas de Donald Trump y sus amenazas de aranceles. Dado el papel crucial de Estados Unidos en la economía mexicana, cualquier medida restrictiva podría afectar negativamente las exportaciones, las remesas y el mercado interno. Además, la volatilidad en el tipo de cambio podría generar mayores costos en productos e inflación, complicando aún más el panorama económico para los próximos meses.