AMLO niega desacuerdos con Sheinbaum y defiende la reforma judicial

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) aseguró este miércoles que su sucesora, Claudia Sheinbaum, está de acuerdo en la necesidad de una reforma judicial en México y desmintió que ella haya solicitado no apresurar la aprobación de la iniciativa que busca elegir a jueces por voto popular.


Durante su conferencia de prensa matutina, López Obrador explicó que Sheinbaum coincide en que la reforma al Poder Judicial es necesaria y que el proceso legislativo se está llevando a cabo respetando los tiempos establecidos, con la iniciativa avanzando primero en comisiones antes de llegar al pleno del Congreso.


El mandatario respondió así a las declaraciones de Ricardo Monreal, futuro coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, quien afirmó que Sheinbaum había sugerido aplazar la discusión de la reforma entre el 1 y el 3 de septiembre. Según Monreal, Sheinbaum pidió que se respetaran todas las etapas procesales y se actuara con cautela, siguiendo estrictamente la ley.


López Obrador, sin embargo, negó estas afirmaciones y acusó a los medios de comunicación de manipular la información para crear una percepción de desacuerdo entre él y Sheinbaum. Insistió en que ambos están en sintonía respecto a la reforma judicial.


El presidente también desestimó la posibilidad de una ruptura dentro de la coalición oficialista, Morena, y reiteró que el plan es votar la reforma en el pleno en septiembre, cuando se espera que el partido tenga los votos necesarios para modificar la Constitución. Si se aprueba la reforma, los mexicanos podrían elegir a jueces, magistrados y ministros de la Suprema Corte a partir de 2025.


La reforma ha generado preocupaciones tanto a nivel nacional como internacional. La relatora especial de la ONU para la independencia de jueces y abogados, Margaret Satterthwaite, expresó su inquietud sobre las amplias implicaciones que esta medida podría tener para la independencia judicial en México. Además, Estados Unidos y Canadá han advertido sobre el posible impacto en la confianza de los inversionistas, mientras que calificadoras y entidades financieras han alertado sobre los riesgos económicos de estas reformas propuestas por López Obrador.